Ayahuasca Sumpay Sedhaní
"Llegó el tiempo de encarnar al Avatar. Cada quien es mensajero del milagro en su palabra y mago de la transformación de su propio universo. Entendamos nuestra naturaleza como Hijos de la Luz y abramos el camino a la Sanación y la Bienaventuranza."
---Sedhaní
Querid@ herman@, quiero compartirte hoy uno de los más grandes misterios que la madre naturaleza nos ha regalado a los seres humanos. Una medicina con increibles facultades, capaz de comunicarnos con la vida misma y con el espíritu que reside en nuestro interior. Una medicina ancestral con propiedades únicas que nos otorgan el poder de reconfigurar nuestras ideas y pensamientos, conduciéndonos al entendimiento del perdón, del amor, de la compasión, de la unión del espíritu en el cosmos y de nuestra esencia como especie consciente y evolutiva.
Yo soy guardián de esta mi amada medicina, la sagrada Ayahuasca y soy la manifestación de su espíritu en la carne. Sanador de almas... Chamán.
Soy la vibración sonora que contiene el espacio de la sanación y el movimiento que transporta las ondas y frecuencias sanadoras hacia las moléculas que contienen y limitan la mente, el corazón y la consciencia.
Soy como tú, un humano en una encarnación cuántica y en búsqueda de su propia iluminación. Quien persigue el alivio de sus temores y la curación de sus culpas y rencores.
Muero y revivo constantemente para alcanzar la disolución del ego y el rompimiento de todo paradigma que detenga la evolución y liberación del espíritu. He conocido y atravezado el sufrimiento, las penas, los remordimientos y los llantos alcanzando mi redención por medio de esta bendita medicina, y de la vibración sanadora manifiesta en el sonido, en el calor, el aroma, en la luz y en el amor.
Soy un ser de luz... soy hijo de la madre tierra. Soy como tú.
Urpillay Sonqollay
Gracias con mi corazón manso de colibrí
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